El intrusismo profesional que tanto está de moda, debido a la crisis y la perdida de empleo, es una lacra para el verdadero profesional.
Y aunque el que contrata al peón de todo y maestro de nada, se piensa que se esta ahorrando un dinero por no llamar al profesional. Profesional ya sea porque lleva toda la vida desempeñando la profesión que aprendió de otros profesionales. Ya sean familiares o maestros de oficios; o porque estudió en escuelas talleres(hablamos de oficios y no de profesiones con titulación académica.
La gran mayoría de las veces, llega a conocer por experiencia propia, que la realidad es otra. Los lobos con piel de cordero abundan en el intrusismo profesional debido en gran manera a que, algunas de las grandes superficies dedicadas al bricolaje, ofrecen pequeñas demostraciones de como se puede realizar algunas instalaciones o acondicionamiento de sus productos. O porque son aficionados a los programas de televisión, dedicados al bricolaje.
La constitución Española recoge que: cada ciudadano está en su derecho legitimo de desempeñar la actividad profesional que más le plazca, y esto lo recoge el articulo 35.
Pero el articulo 36 dispone que la ley regulará el ejercicio de las profesiones tituladas. Lo que restringe el acceso a ciertas profesiones básicamente de naturaleza administrativa. Pero también laboral, mercantil e internacional, y la falta de titulación es punible de multa o cárcel.
Por lo que se desprende que siempre hará mejor un pastel el que lo ha hecho siempre que el que lo hace por primera vez.
Si quieres un trabajo de calidad del que no arrepentirte los próximos años, contacta con verdaderos profesionales de la materia.